jueves, 16 de junio de 2011

Sobre individuos y egos

Se me ocurrían muchas formas de empezar el blog, pero todas me parecían aburridas y muy formales, contar "qué soy" "que hago", mis expectativas sobre este modo de comunicación, etc... Así que me decidí por seguir mis instintos y pasar directamente a los bifes. Hoy los bifes me llevan a la imperiosa necesidad de expresarme sobre un tema que vengo charlando con gente allegada desde hace tiempo y poder reflexionar acerca del "individualismo y el hiperpersonalismo" en la política cotidiana de la Ciudad de Bs. As.
El hecho que me inspiró fue la patética "lucha" entre el pinosolanismo por un lado contra el binnerismo y el stolbizerismo (remarco los ismos en tono crítico). 
La decisión del líder de Proyecto Sur de no acordar en la alianza "progresista" en la Provincia de Buenos Aires, y fundamentalmente sus excusas me llevan, por un lado a repensar el rol que juegan en individualismo y el hiperpersonalismo en la política y por el otro a ver cuál la motivación para hacerlo.
Particularmente no soy un amante de la "rosca" política, quizá porque no la entiendo, ni entiendo para que sirve. Más allá de si el armado del frente "progresista" era una opción válida para luchar el poder con el FPV, era al menos una idea racional, tenía sentido encontrar a una serie de referentes (sin proyecto nacional obviamente, pero sí con buenas ideas locales y provinciales). 
Lo sucedido ayer y su repercusión en los medios muestra lo más triste de la política, la lucha por pequeñeces insignificantes, la lucha por figurar más que por trabajar, en última instancia la discusión por las listas y la ubicación, en casos donde NO HAY PROYECTO NI IDEAS, SÓLO CONGLOMERADO DE GENTE, es una DISCUSIÓN POR LA CAJA. Un/a legislador/a o diputado/a más no representa nada frente a una política vacía de ideas concretas y llena de declaraciones vacías, únicamente la posibilidad de manejar una caja chica.
Y por si fuera poco, a este objetivo real pero implícito, se le suma la lucha de ego, la incapacidad total a ceder, la negociación vista únicamente como un juego de suma 0. Quizá el problema sea el "pinismo". La actitud de Pino frente a Lozano para decidir el candidato de Proyecto Sur a Jefe de Gobierno, la decisión de el Vice jefe y los lugares de los legisladores frente a otras fuerzas muestra el excesivo rol que juega una persona y su ego dentro de un armado "democrático".
Si el "progresismo" quiere diferenciarse del FPV (que dió una muestra de verticalismo en la toma de decisiones para la elección de sus candidatos), va a tener que encontrar referentes que construyan horizontalmente, que sean únicamente voceros de un proyecto más amplio, con candidatos surgidos del concenso y no estar representado por individuos hiperpersonalistas que consideran la política una lucha de egos.
Bueno, eso es todo por hoy.